Se quedó en el aire un apartado de "anécdotas con el Dr. Oliva". Yo entre todas me quedo con una: Aquella en la que que un paciente, tras ser examinado muy competentemente por una residenta, daba grandes alaridos en medio del pasillo del tipo "¡Yo no quiero que me vea una niña!¡Yo quiero que me vea el médico!" Y Arturo, con el fair play que siempre lo ha caracterizado, le replicó "Oiga Usted: Aquí esta joven donde Ud. la ve, es doctora, y además, tiene más estudios que Ud., su mujer y toda su familia juntos". Gran éxito de público y crítica, con abundantes sacudidas de pañuelos blancos en los tendidos.
Os animo a que pongáis las anécdotas que recordéis y creais simpáticas.