Resulta que su padre está afiliado a la Seguridad Social y además también tiene un seguro privado (no sé cual). En pricipio han ido al seguro privado, donde lo han atendido muy bien; le han hecho todas las pruebas muy rapidamente, trato muy personalizado, etc. Pero ahora viene lo bueno: le plantean el tratamiento intravítreo con antiangiogénicos (Avastín, por supuesto, que el otro es muy caro), donde sólo le cubren la 1ª dosis. El resto se las tiene que pagar él, a 1500 euros el pinchazo. No sé como estará ésto estipulado en otras compañías, pero, desde luego, este planteamiento me parece un timo.
A ver si sois listos y adivináis donde va a seguir el resto del tratamiento... ¡En en vilipendiado, menospreciado y denostado seguro, por supuesto!.
Una vez más: no sabemos lo que tenemos. Si estuviéramos como en EEUU, por ejemplo, yo ahora me veía como esos personajes de serie americana que han empeñado todo, vendido su casa, etc. para pagar la factura del hospital.
¡Viva el Seguro Obligatorio de Enfermedad!